«Haman» fue citado en el Corán antes de la traducción de los jeroglíficos
Entre las revelaciones contenidas en el Sagrado Corán, una de ellas ha sido tema de mucha discusión entre los arqueólogos y científicos.
El Corán informa sobre el antiguo Egipto varios hechos históricos descubiertos apenas en los últimos tiempos.
Los jeroglíficos del antiguo Egipto fueron descifrados hace aproximadamente 200 años por el francés Jean-François Champollion.
Sin embargo, el nombre «Haman» se cita en seis aleyas del Corán, se menciona junto con el del faraón durante la vida del Profeta Moisés (la paz sea con él).
En el Sagrado Corán se dice que Hâmân vivió en Egipto durante el período de Moisés (la paz sea con él), era un amigo cercano del faraón e hizo el trabajo de construcción como se indica en la aleya 38 del Sura al-Qasas: Y el Faraón dijo: «¡Oh, Haman! Hazme un fuego sobre el barro y construye para mí una torre alta para que, quizás así, pueda echar un vistazo al dios de Moisés, porque creo que él es un mentiroso».
El célebre Dr. Maurice Bucaille, miembro de la Sociedad Francesa de Egiptología relató en uno de sus libros que quería saber si este nombre fue mencionado en los jeroglíficos conservados. Para ello se contactó con un egiptólogo y le preguntó sobre esta palabra en el Corán, revelado en el siglo VII.
El egiptólogo certificó, después de consultar el «Diccionario de Nombres de Personal del Nuevo Reino» que encontró este nombre con una nota: «Jefe de Trabajadores Profesionales».
La existencia del nombre Haman en las antiguas inscripciones egipcias demuestra que el Corán proporciona información histórica que no pudo ser comprendida en la propia época del Profeta (PB), los jeroglíficos solo pudieron descifrarse a fines del siglo XVIII.
En conclusión, el descubrimiento del nombre Haman en los antiguos jeroglíficos egipcios confirma la naturaleza infalible del Sagrado Corán, la palabra de Dios.
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